Ser director ejecutivo de una empresa valuada en más de US$900 millones tiene sus ventajas y desventajas. En el lado positivo, se obtiene cierta fama empresarial y se gana mucho dinero. Sin embargo, en el lado negativo, cualquier movimiento mal interpretado por el público puede arruinar en segundos una carrera construida durante años.
Justamente eso fue lo que le sucedió a Andy Byron, el CEO de Astronomer, una empresa de infraestructura que proporciona herramientas para ayudar a organizaciones a gestionar y optimizar flujos de trabajo, debido a que fue captado durante un concierto de Coldplay en Boston, Massachusetts, abrazando a una mujer que no era su esposa.
Esa mujer era Kristin Cabot, la directora de personal en Astronomer, quien se había comprometido recientemente con un diseñador de modas. Ante esta situación, las respectivas parejas de Byron y de su presunta amante se enteraron de la relación extramatrimonial mediante un video que se viralizó, donde ambos aparecían abrazados.
Una vez que Andy y Kristin se dieron cuenta de que estaban siendo grabados, Cabot se tapó la cara y se dio la vuelta. Por su parte, Byron se agachó para no ser visto, pero fue demasiado tarde, ya que su esposa desde hace más de 20 años, Megan Kerrigan, ya había eliminado su perfil de Facebook debido a la cantidad de mensajes que recibió.